Estos eran dos ratones que andaban por la carretera, en eso pasa un tráiler y el chofer tira un cigarro de marihuana, entonces le dice un ratón al otro, Mira vamos a darle una fumadita, y el otro ratón le contesta, No, yo no le hago a eso Bueno, ¡pues yo sà le fumo! Y que se pone bien loco. Después de dos toques, el méndigo ratón se creÃa Supermán. En eso venÃa otro tráiler por la carretera y dice el ratón que fumó al otro:
Vas a ver cómo te paro ese tráiler con una mano.
Y le dice el otro: No chingues, no seas güey; te van a aplastar.
¡Vas a ver!, le contesta el otro, y diciendo y haciendo, se pone en medio de la calle con una mano haciendo alto y con la otra en la cintura.
En eso, que se le poncha una llanta al tráiler y por buena suerte que se para en la mera mano del ratón.
Cuando se para el tráiler, se baja el chofer y dice: ¡Me lleva la madre! Voy a tener que sacar el gato.
Y dice el ratón:
Ni me amenaces güey. ¡Que te volteo el pinche tráiler!