Una mujer estaba dándose vuelo con el amante, cuando, de pronto, escuchan que el marido había entrado al departamento depués de un viaje de dos semanas…

¡Pronto! grita la mujer ¡quédate aquí parado como si fueras una estatua!

El amante obedece y, en eso, entra el marido al cuarto….

Mujer -dice el estupido cornudo- ¿qué hace este hombre desnudo aquí en mi habitación?

No querido, no -dice ella nerviosa- no es un hombre… es un robot de última generación, hecho para satisfacer sexualmente. Fíjate en la piel, tócalo. ¿Verdad que están llegando a límites insospechables en eso de la creación de robots?

Está bien, prepárame algo de comer que el viaje me dejó hambriento y con deseos de hacer el amor…

Uy amor, estoy con la menstruación.

Úta… bueno… entonces prepárame algo de comer…

La mujer se va a la cocina y el marido observa al amante y decide que si servía para la mujer, debería servir también para el hombre, así es que lo coloca en cuatro patas para atacarlo por Detroit y, justo cuando iba a entrar a matar a fondo, el robot hace un anuncio:

E-r-r-o-r d-e-l s-i-s-t-e-m-a. Z-o-n-a e-q-u-i-v-o-c-a-d-a.

Fúrico, el tipo levanta al robot, lo acerca a la ventana y justo cuando estaba a punto de lanzarlo desde el piso 22, se escucha otro mensaje:

F-a-l-l-a r-e-s-u-e-l-t-a… P-r-u-e-b-e o-t-r-a v-e-z