Tenía que asistir el Papa en Florencia a un congreso muy importante. Le dice a su chofer, Vamos que tenemos que estar en Florencia en una hora. Se sube en el coche, atrás claro, y corre las cortinillas de las ventanas del vehículo para pasar inadvertido…

Van por la autopista y el chofer se siente indispuesto, le dolía mucho el estómago y no podía conducir. Se paran en el lateral y pasa el chofer atrás y el Papa a conducir porque no tenían tiempo de esperar una ambulancia.

El Papa mira la hora… Faltan 15 minutos y estoy a 50 Km….empieza a acelerar 140 Km/h…. 150, 180, 200… Unos policias en moto les ven pasar… les siguen, les paran en el arcén, se pone un policia delante y otro detrás, se bajan y se acerca uno a la ventanilla del conductor del coche…

No sabe usted que circulaba a…, se da cuenta que es el papa, suelta el bolígrafo y la libreta de multas rápidamente, se cuadra, A sus órdenes, disculpe…, para el tráfico, deja que el Papa se vaya… y cuando se acerca al otro policía, el segundo le pregunta, ¿Quién era que te has cuadrado y no le has multado?

Y contesta Al de detrás no le he visto porque llevaba las cortinillas cerradas, ¡PERO TENÍA QUE SER DIOS PORQUE EL QUE CONDUCÍA ERA EL PAPA!