Un padre que se hallaba paseando con su hijito de 8 años, cogidos de la mano, por los alrededores de una casa de campo y en eso, que el niño se percata de la presencia de un burro que estaba pastando por allí el cual, estaba totalmente empalmado, con su pene totalmente tieso y que le llegaba al suelo. El chaval asombrado le dice al padre:

¡Mira papá, ese animal tiene un palo muy grande debajo de la barriga!, ¿qué es lo que le ocurre?

El padre ruborizado y balbuceando le contesta:

Eso no es nada mi niño. Eso es que el pobre animal está enfermo. Cuando ellos se ponen malitos, les crece eso debajo de la barriguita.

Al día siguiente, se hallaba el niño paseando por el mismo sitio, pero esta vez iba solo con la madre y se percata de la presencia del mismo burro, el cual seguia con el pene totalmente tieso y el niño suelta una exclamación:

¡Mira mamá, mira ese burrito con ese palo debajo de la barriguita!, eso es porque está malito y le sale eso así.

La madre totalmente asombrada le pregunta:

¿Pero a tí, quien te ha dicho que ese animal está malito por ponerse de esa manera, hijo mio?

El niño muy seguro, le contesta:

Papá me lo dijo ayer.

La madre soltando una sonrisa sarcástica le dice:

Ah, conque fue tu padre; pues ya le gustaría a tu padre tener la mitad de salud que tiene ese burro.