En un congreso feminista una francesa, una italiana y una mexicana comentaban cómo les habÃa ido con su propuesta de fin de milenio, la cual consistÃa en decirles a sus maridos que ya no iban a lavar los calzones, ni hacer de comer, ni llevar a los niños al colegio.
La francesa dice, No pues el mÃo se me quedó viendo y el primer dÃa nada, el segundo más o menos lo aceptó y se hizo solo sus alimentos y el tercer dÃa todo normal.
La italiana dice, No pues mi esposo el primer dÃa nada, el segundo nada, hasta el tercer dÃa comprendió que iba en serio y llevó los niños al colegio y de regreso se compró una pizza.
La mexicana dice: No, pues que le digo a mi viejo, mira, ya no te voy a lavar tus chones, ni te voy a hacer tus frijoles, y a los niños ni creas que los voy a llevar a la escuela rural, y todas sus colegas preguntaron que cómo habÃa reaccionado su marido y dice la mexicana: No, pues el primer dÃa no vi nada y el segundo tampoco. Ya por el tercero empecé a ver poquito con el ojo derecho.